China quiere un orden multipolar con Europa como uno de sus polos. El resultado de la convocatoria del referéndum del Brexit confirma la convicción de Pekín de que la democracia liberal no es para ellos.
La noticia de que Reino Unido ha decidido dejar la Unión Europea tras 43 años en ella y con dos tercios del Parlamento británico en contra, produjo en China una sorpresa no menor que en el resto del mundo. El presidente Xi Jinping se había manifestado, en el curso de la campaña del referéndum, a favor de que Reino Unido permaneciera en la UE, al igual que Barack Obama y los líderes de los países miembros. El primer ministro chino, Li Keqiang, declaró a los medios de comunicación: "China quiere una Europa unida y estable, y un Reino Unido, estable y próspero. Estamos viviendo incertidumbres crecientes en la economía global. Necesitamos hacer frente juntos a los desafíos, reforzando la confianza recíproca y creando un entorno internacional estable". El China Daily, portavoz del gobierno chino, escribió: "El mundo necesita una UE sana y unida. China también. Si China hubiese tenido voto en el referéndum de Reino Unido habría votado a favor de seguir en la UE".
China ha sido siempre partidaria de una Europa unida y fuerte, y le cuesta entender las dificultades en el progreso hacia una integración más profunda en lo económico y lo político. En cierta ocasión, Deng Xiaoping le dijo al expresidente Felipe González: "Ustedes los europeos, tan poquitos que son, ¿cómo les cuesta tanto ponerse de acuerdo?"