Los indicadores habituales de la segregación ocupacional por sexo pueden ser sumamente engañosos aplicados a los países en desarrollo debido a las diferencias estructurales, culturales e históricas que los separan de los desarrollados, tomados como modelo en los estudios sobre segregación. En Jamaica, debido al antiguo régimen de esclavitud, la mujer lleva siglos presente a gran escala en la población activa, y no decenios, como en los países desarrollados. Según los autores, la reserva importante e indiferenciada de trabajadores no calificados de Jamaica se traduce paradójicamente en niveles inferiores de segregación laboral, con predominio de mujeres en las ocupaciones más calificadas.