Nuria Martínez Sánchez
El juego de la competencia en el mercado conlleva una serie de riesgos, que algunos empresarios utilizan a su favor para sacar el máximo beneficio posible de una forma desleal e ilícita, perjudicando a sus directos competidores, al propio mercado y a los consumidores. El aprovechamiento injusto de la marca ajena a través del engaño o la confusión están sancionados por nuestra legislación, pues impiden el buen funcionamiento del mercado. La jurisprudencia europea ha jugado un papel fundamental a la hora de encorsetar esta materia.