Acceso usuarios
Francisco Javier Fernández Orrico 
Pocas iniciativas que se ponen en práctica en materia de Seguridad Social, suponen una mejora en la posibilidad de acceso a las prestaciones. Eso es debido a la imperiosa necesidad de adoptar medidas que afronten con decisión el grave problema existente ahora y especialmente en los años venideros, de la viabilidad del Sistema.
Una de aquellas iniciativas –objeto del presente análisis–, establecida recientemente, sin duda por motivos de equidad y de proporcionalidad, ha cambiado (una vez más) los criterios de aplicación sobre aquellas prestaciones, precedidas de contratos a tiempo parcial. En estos supuestos, los trabajadores venían siendo perjudicados porque para causar derecho a la prestación, debían trabajar y cotizar durante más tiempo con jornada reducida o parcial que un trabajador a jornada completa. Si además, esa diferencia, afectaba en su mayoría a las trabajadoras, tal distinción podía suponer una discriminación. Y es que, como se detalla en el cuerpo del comentario, los efectos que produce en la Seguridad Social la parcialidad en la jornada laboral, en particular, sobre la acción protectora de los trabajadores, venían ocasionado sucesivos pronunciamientos de los Tribunales que han detectado ausencias de proporcionalidad, basándose en algunos casos en la existencia de discriminación indirecta por razón de sexo (STJUE 22 noviembre 2012, C-385/11, Elbal Moreno, y STC 61/2013, de 14 de marzo, entre otras). Todo ello, ha provocado un cambio en la normativa, contemplada básicamente en los vigentes artículos 245, 247 y 248 del vigente texto refundido de la Ley General de la Seguridad Social, aprobado por Real Decreto Legislativo 8/2015, de 30 de octubre y con entrada en vigor el 2 de enero de 2016.
Del comentario se pueden destacar los novedosos conceptos, como el coeficiente de parcialidad, así como el coeficiente global de parcialidad utilizados para ser aplicados en la determinación del período mínimo de carencia exigido; así como las modificaciones en cuanto a la determinación de la base reguladora y del porcentaje (especialmente cuando no se alcance el período mínimo exigido en la correspondiente prestación con jornada completa) de las prestaciones en estos supuestos. Para ello, se han propuesto algunos ejemplos, en los que a igualdad de datos se demuestra que con la nueva regulación los trabajadores con contratos, a tiempo parcial, acceden al derecho a prestaciones, que en iguales condiciones se les hubiera denegado en la anterior normativa.
Finaliza el análisis con el ruego, que expresa la necesidad de que se confeccione a la mayor brevedad posible, un nuevo reglamento que sustituya al actual RD 1131/2002, de 31 de octubre, así como, unas breves consideraciones sobre los efectos de las nuevas reglas de aplicación en las prestaciones derivadas de los contratos a tiempo parcial.
Few initiatives that are implemented in Social Security issues represent an improvement in the possibility of access to benefits. This is due to the urgent need to adopt the necessary measures to decisively face the serious problem of feasibility of the system now and in the future.
One of those initiatives, which is the target of the current analysis, has recently been established without any doubt due to equity and proportionality reasons and has made change (once again) the application criteria over those benefits, preceded by part-time contracts. On these grounds and in order to be entitled to the benefits, workers used to be harmed because they had to work and contribute longer at their part-time jobs than fulltime workers. Furthermore, if this difference was mostly affecting female workers, such a distinction could become sex discrimination. As it is described in the comment, the effects of part-time jobs on Social Security, especially on workers’ protection, have been causing consecutive pronouncements of courts, which have discovered lack of proportionality, based for some cases on the existence of indirect sex discrimination (STJUE 22th November 2012, C-385/11, Elbal Moreno, and STC 61/2013 of 14th March, among others). All this has led to a change of the regulation, covered basically in the existing articles 245,247, 248 of the revised text in force about the General Law of Social Security passed by Royal Decree 8/2015, dated 30th October and into force on 2nd January 2016.
Novel concepts can be highlighted in this comment, such as the partiality coefficient and the overall partiality coefficient, which are used for the calculation of the required minimum waiting period; as well as modifications to calculate the regulatory base and the percentage of benefits in these cases (especially when the minimum period required in the corresponding full-time benefit is not reached). For that purpose, several examples have been proposed which show that, for the same data and the new regulation, part-time workers are entitled to receive the benefits that would have been denied to them in the previous regulation for the same conditions.
This analysis finishes with the request of the prompt need of a new regulation replacing the current RD 1131/2002 of 31st October, as well as some brief comments on the effects of new rules being applied to the benefits derived from part-time contracts.
