La medida de cuarentena para hacer frente al virus ébola fue aplicada a 58 personas que tuvieron contacto con focos de infección. La ley y el protocolo médico avalan el internamiento forzoso o aislamiento preventivo de personas por razón de salud pública, lo que en principio supone una restricción justificada de derechos fundamentales. Un acontecimiento tan extraordinario como el vivido en España con el virus ébola requería también medidas excepcionales de gran impacto para la población, especialmente para pacientes infectados y profesionales sanitarios. El despliegue de recursos en España con motivo del ébolavirus no tiene precedentes, y sí consecuencias de muy diverso orden que fueron analizadas por expertos en el Foro Sanidad y Derecho: desde las puramente asistenciales hasta las organizativas, económicas, jurídicas, y, por supuesto, éticas.