Las retribuciones en especie pueden constituir una parte importante de la remuneración de los empleados de la empresa. Son forma de retribución complementaria o alternativa en forma no dineraria, bien en forma de bienes y servicios, bien como retribución salarial percibida de forma diferida. Son un derecho adquirido ya que toman un rol esencial en la relación contractual que se establece entre el empleado y la empresa. Las discusiones se centran fundamentalmente en cómo utilizar los beneficios para distribuirlos de forma que la empresa se ahorre tanto en coste como sea posible sin afectar negativamente a sus capacidad para atraer o retener gente.