En el presente artículo se expone una visión del espacio psíquico y del inconsciente desde una perspectiva generativa biológico-cultural o compleja, en la cual no hay primacía de lo biológico sobre lo cultural ni lo contrario, sino una interacción constante entre ambos dominios, de modo que, si en la praxis del vivir, se cultivan las poéticas del observar colegiante o del observar privilegiante, se generarán espacios psíquicos verticales, dominantes y competitivos o espacios psíquicos horizontales, amables y colaborativos.