Octavi Martí
Los 60 años de historia de Le Monde, recién cumplidos, no han podido ser más brillantes ni más complicados. Primer periódico de Francia, leído en las cancillerías de medio mundo (y en la España franquista, de lectura obligatoria entre la joven progresía emergente), sin embargo no ha sabido adaptarse a los tiempos que corren. Los síntomas: la pérdida de lectores, sobre todo jóvenes, y el reavivamiento de las disensiones internas.