El trabajo aborda aspectos destacables introducidos por la Ley Orgánica 1/2015 en el Código Penal en materia de suspensión de la pena, si bien huelga decir que muchas de las deficiencias que sufre la regulación del Código Penal en esta materia no se han visto resueltas por la reciente reforma. Se realiza, además, una reflexión sobre la necesaria intervención del juez en la fase de ejecución penal. Principio de intervención que se encuentra en peligro debido a la sobrecarga de trabajo que sufren los órganos jurisdiccionales y, más concretamente, los del orden penal. Para salvaguardar esta exigencia se cree necesaria la creación de una figura ya existente en otros países de nuestro entorno: el juez de ejecución penal.