Tantos como para formar un tratado son los Causas Generativos de los Accidentes a que hemos aludido en este título, y por eso habremos de limitar su estudio a, las más generalmente conocidas y sobre las cuales tiene efectividad práctica el proceso etiológico, sin hacer caso omiso de los responsabilidades que surgen por el mal sostenimiento de los aeródromos y caminos de uso público, así como de los equipos de servicio disponibles para la finalidad que se propone llenar una empresa, sea cual fuere la entidad político-administrativa que los expresados medios y vehículos de transporte pertenecen. (…)