La discriminación múltiple es la que sufre una persona sobre la base de más de un motivo discriminatorio. Es un fenómeno que ha cobrado notable actualidad a causa también del surgimiento de nuevos motivos de discriminación como atributos de la persona, que combinados pueden generar una discriminación no solo plural sino múltiple, y cuyo tratamiento requiere tener en cuenta los efectos de la combinación en una misma persona de distintos factores. La normativa antidiscriminatoria se había configurado para proteger a las personas víctimas de un concreto motivo de discriminación, y no ha resultado adecuada para tratar a la víctima de una discriminación múltiple, para superar las especiales desventajas o exclusiones que genera. Se examina el concepto de discriminación múltiple como discriminación interseccional cualitativamente diferente, el tratamiento de la cuestión en la Unión Europea, la previsión contenida en la Ley 7/2007 y las implicaciones que para el operador jurídico ha de suponer la aceptación de esta especie de discriminación, también para superar las dificultades de su tratamiento tanto en el plano judicial como en el plano normativo.