El presente artículo tiene por objetivo aproximarse a una explicación en torno al por qué se evidencian resultados discretos frente a la ejecución de políticas referidas a la participación social en salud en Chile. A pesar de que, desde la década de los �90, los gobiernos chilenos han experimentado un giro positivo hacia el incremento de espacios de inclusión para la comunidad asociada a establecimientos de salud, a través de los llamados Consejos de Desarrollo Local, y que se ha visualizado la pertinencia y relevancia debido a los aportes que en potencia se pueden realizar en tanto gestión, control social, toma de decisiones en salud, entre otros, los resultados exhibidos son aun muy discretos. Para los trabajadores insertos en el ámbito salud sería de gran apoyo poder tener una lectura diferente en torno a este fenómeno, que realce la importancia de reconocer los elementos preconvencionales que operan a nivel de ejecución y ejecutores de políticas publicas de corte postconvencional. Desde allí, la disciplina tomará una importancia crucial en tanto el rol que se cumple como agente democratizadores y promotores del bienestar común.