Se abordan etnográficamente las trayectorias migratorias y los itinerarios de salud de mujeres migrantes bolivianas que trabajaron y vivieron �en muchos casos con sus hijos- en talleres textiles clandestinos del Área Metropolitana de Buenos Aires, expuestas a �situaciones de riesgo� concretas para su salud. La falta de documentación, así como la prohibición de salir del taller, vulneran su derecho a la atención sanitaria (como el resto de sus derechos). Lo anterior se ve potenciado por sus trayectorias migratorias, que comúnmente se dan en el marco de mecanismos delictivos como la trata y el tráfico de personas, y la reducción a la servidumbre. Luego de un periodo que va de los seis a los doce meses, algunas de estas mujeres abandonan los talleres y se insertan en organizaciones que luchan contra el trabajo esclavo, o en cooperativas textiles con condiciones dignas de trabajo