Mientras varios países europeos intentan ayudar a Estados Unidos a capturar a Edward Snowden, el pretendido "Eje del Mal" latinoamericano ofrece asilo colectivo y lidera la defensa del joven ex analista de la National Security Agency (NSA) para que siga revelando al mundo cómo Washington y sus "Socios de los Cinco Ojos" nos espían y controlan todas nuestras comunicaciones.