El desarrollo del Estado del Bienestar en España está ligado a la constancia en el mantenimiento de los principios que han caracterizado las políticas progresistas. La búsqueda de la igualdad y la justicia social tienen que ser las ideas-fuerza sobre las que debe seguir asentándose el discurso progresista. Frente al incremento de los déficit sociales, que provoca el modelo neoliberal, hay que oponer los valores del socialismo democrático.