La Revolución Siria es un ejemplo más de cómo la imagen de la mujer no corresponde a su papel real.
Centrados exclusivamente en la degeneración armada del conflicto, los medios internacionales pintan un escenario «masculino» sin considerar que las sirias no solo han sido las anticipadoras de las manifestacio- nes de protesta, sino que participan también en el conflicto armado que está destruyendo un pueblo, sin distinción de género o de edad.