Manuel Monereo Pérez
La estrategia político-militar norteamericana, aparentemente surgida como respuesta a los ataques del 11 de septiembre, en realidad viene elaborándose por las elites económico-militares desde hace más de una década. Los atentados terroristas contra las Torres Gemelas y el Pentágono aceleraron los ritmos, y dieron a los abanderados de la estrategia imperial la llave para poner en práctica su idea del nuevo orden internacional. Un modelo basado en el poderío militar y económico de Estados Unidos, como país no sometido a ley alguna y creador, él mismo, de Derecho: el de la fuerza.