El Gobierno del Partido Popular decidió unilateralmente participar en la guerra de ocupación de Iraq, sin escuchar a los ciudadanos ni a los poartidos políticos de la oposición. A la gravedad de incumplir el derecho internacional, saltar por encima de la Organización de Naciones Unidas y desoir el clamor internacional de los ciudadanos en contra de la guerra, hay que añadir ahora la insistencia del Partido Popular en mantener a las tropas españolas de ocupación en Iraq sinplantearse alternativa alguna.