), págs. 295-301La organización económica internacional de África se expresa mediante una auténtica sopa de letras, de decenas de entidades de cooperación e integración más o menos dispersas y poco operativas; todo lo contrario de un verdadero melting pot. Son intentos fragmentarios en un continente extenso, hasta hace poco de una baja densidad de población, y ahora en rápido crecimiento demográfico, con la previsión de pasar entre 2010 y 2100 de 1.000 a 3.500 millones de habitantes. Un amplio escenario en el cual el principal obstáculo a la integración radica en que no hubo una fase previa de cooperación de ámbito global, debido a las fronteras artificiales y otros condicionamientos del colonialismo. Con todo, en África Occidental, Central, Oriental y Austral, van configurándose núcleos de integración con avances comparativamente notables; e incluso con uniones monetarias relativamente eficientes en las áreas occidental, central y austral. A lo cual se une actualmente la idea panafricanista de ir a una gran Comunidad Económica Africana, con la que se aspira a emular el modelo de la integración europea. Adicionalmente, cabe destacar que África está recibiendo ahora el impulso del comercio y las inversiones Sur-Sur, sobre todo por parte de países emergentes como China, India y Brasil.