El artículo quiere presentar al lector la riqueza y las fuentes principales de enriquecimiento de los fondos de la Bibilothèque nationale de France (BnF) sobre el continente latinoamericano. En lo que se refiere a las colecciones impresas hasta 1940, las donaciones y los canjes internacionales fueron los dos canales más importantes de colecta de documentos. Entre todas las donaciones recibidas destacan el fondo del cónsul Léonce Angrand, el fondo de la Comisión Nacional de Cooperación Intelectual y el del médico y poeta Oscar A. Larrauri. En la posguerra, las adquisiciones retoman su ritmo regular y abarcan disciplinas algo descuidadas hasta ese momento como la sociología, la antropología y la ciencia política. Con el depósito legal, las adquisiciones se vuelven la fuente más importante de crecimiento del fondo general que se ubica, desde 1995, en la nueva sede de Tolbiac. El artículo presenta también la variedad de las colecciones especializadas: manuscritos, planos y mapas, grabados y fotografías, artes del espectáculo que se hallan todavía en la sede histórica de la Bibliothèque nationale: rue de Richelieu