Alvaro Cuesta Martínez
La izquierda y las organizaciones políticas socialdemócratas tienen la obligación histórica de volver a ser relevantes y defender la autonomía de la política frente a la economía y el mundo financiero global. El principal deber de la socialdemocracia es articular, defender y organizar como antaño a los sectores sociales especialmente más estafados, asaltados, expropiados y castigados por la crisis y por las decisiones de los poderes públicos y privados, y dar sentido a su lucha generando esperanza, con voluntad de transformación.