El artículo estudia el reparto de ingresos del sistema público de pensiones en España desde una perspectiva de género. El análisis revela que las diferencias entre hombres y mujeres son evidentes tanto en los derechos adquiridos sobre cada clase de pensión como en la cuantía de las pensiones. Eso se debe a que el carácter contributivo del sistema reproduce las desigualdades laborales de ambos géneros que, en última instancia, proceden de la división social de funciones en la que se sigue responsabilizando a las mujeres del trabajo no remunerado de cuidados. Se trata de una conclusión que coincide con la que obtienen otros estudios similares realizados sobre países europeos y de otras zonas. Tras esa constatación, también se analiza el reflejo de los condicionantes laborales en el interior del colectivo de las mujeres pensionistas. En ese sentido, en el trabajo se obtienen dos conclusiones relevantes: los ingresos de las mujeres pensionistas empeoran con la edad y el grado de desigualdad entre las pensiones de las mujeres es menor que el que se observa entre las pensiones de los hombres.