Gracias a un "código genético" ganador, Wal-Mart redefinió el sector del comercio minorista en los países donde tiene fuerte presencia y les impuso nuevas reglas, tanto a competidores como a proveedores. Pero, a juicio de William Marquard, quien conoce la empresa desde dentro, con una estrategia adecuada es posible ponerle límites a su poder. Sus recomendaciones son válidas para cualquier compañía que opera en una industria con un jugador dominante.