El trabajo contiene un análisis de las nuevas posibilidades penales en la lucha contra el blanqueo de capitales, derivadas de la importante reforma que entró en vigor a finales del año 2010. La misma introdujo significativas novedades en los propios tipos penales de blanqueo, especialmente el castigo de la mera posesión o utilización de los bienes provenientes de un delito. Pero además, la reforma también incorporó otros instrumentos relevantes en la lucha contra el blanqueo; se trata del denominado comiso ampliado, así como la posibilidad de adoptar el comiso en los delitos imprudentes. Otra medida fundamental ha sido la inclusión de los tipos de blanqueo en el modelo de responsabilidad penal de las propias empresas.