Antonio José Quesada Sánchez
Las personas que practican un deporte asumen los riesgos que se pueden derivar del ejercicio del mismo, y que de ello se puede derivar algún tipo de daños, pues suele estar íntimamente conectado con el atractivo de dicha práctica. Pero en el caso de que la persona que practica dicha actividad lo haga durante sesiones de aprendizaje del mismo, esa asunción de riesgos no puede ser exactamente igual a la de alguien que está perfectamente formado o es un profesional: el docente que está al frente debe garantizar que ese alumno no asumirá más riesgos que los inevitables. En el presente trabajo se realiza un recorrido jurisprudencial por las Sentencias más relevantes a este respecto.