El Estatuto medieval del Peregrino a Santiago vino a ser una manifestación del "Ius commune" que ha llegado hasta el siglo XXI. Representa, en cierto modo,un anticipo del actual Derecho comunitario (ciudadanía europea, protección del usuario de las vías de comunicación, asistencia hospitalaria internacional etc). Se han ampliado y diversificado las motivaciones subjetivas de los peregrinos, pero subsisten sus motivaciones religiosas en sentido amplio. Hoy en día, el Camino de Santiago es factor de europeización y prueba evidente de las raíces cristianas de Europa.