Se ofrece en este trabajo un planteamiento, eminentemente práctico, de la responsabilidad, tanto civil como penal, de los actos judiciales, haciendo hincapié tanto en las posibilidades indemnizatorias que supone, como en la específica responsabilidad penal, a través del examen de la doctrina más reciente sobre el delito judicial por antonomasia, la prevaricación.