Noriyuki Takayama
En el presente artículo se examinan las implicaciones de las proyecciones de 2002 sobre la población para las tendencias futuras de los costos de las pensiones y de la asistencia de salud en el Japón. Los actuales programas redistributivos de pensiones y de salud han traído como resultado para las personas de edad avanzada ingresos per capita considerablemente más altos que para la población que aún no ha llegado a la ancianidad. Se necesitan reformas importantes que disminuyan el alcance de esa redistribución, pero las consideraciones políticas sólo han hecho factibles las innovaciones graduales. Sin embargo, se ha comenzado a introducir iniciativas de pensiones privadas y de paso del modelo de mando y control manejado por el gobierno central a un modelo de contratación de la asistencia de salud