La cocina es una de las primeras muestras de adaptación cultural que diferencia al ser humano del resto de animales. Si la estrategia alimentaria connatural a la evolución biológica se basa en la modificación de las características propias para acceder con ventaja al alimento, el Homo que cocina lo que hace es modificar su entorno para convertirlo en más comestible. Modificarse o modificar, adaptarse o adaptar, esta es la cuestión.