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Los hechos ocurridos el 11 de septiembre originaron una serie de debates acerca de cómo y cuánto ha cambiado el orden internacional. Aún reina la confusión entre quienes afirman que "nada cambió" y para quienes "nada será igual desde 11/9". La dispersión de registros ha llevado a estudiar acontecimientos o procesos como si se tratara de cambios estructurales, pero sin poder explicar cómo pueden transformar la política internacional. También se ha provocado una confusión metodológica a la hora de buscar análisis útiles para detectar los cambios e identificar las continuidades. Este trabajo persigue tres objetivos centrales. Primero, presentar una metodología de análisis del cambio organizando los modos de abordaje con que la teoría de las relaciones internacionales ha venido trabajando. Segundo, intentar utilizar esta metodología para entender las posibles transformaciones del orden internacional desde el 11 de septiembre de 2001. Tercero, ofrecer algunas conclusiones e hipótesis de trabajo sobre el estudio del cambio en la política internacional. El trabajo llega a cuatro conclusiones: a) todas las teorías de las relaciones internacionales demandan explicar lo sucedido el 11 de septiembre y todas tienen argumentos para dicha demanda; b) ligado a esto último, el 11 de septiembre no impone la necesidad de pensar nuevas categorías para entender sus causas y consecuencias; c) en una amplia perspectiva, y lejos de anuncios estruendosos, el 11 de septiembre no ha provocado un cambio significativo en la política internacional en términos históricos y sistémicos, y d) para comprender mejor el cambio en las relaciones internacionales, es necesario un abordaje histórico, largamente soslayado por la disciplina.
