Manuel Toharia Cortés
La cultura científica no ha progresado tras 20 años desde aquella incipiente revolución de la política científica española que fue la Ley de la Ciencia. Hoy podemos observar, que en ese tiempo las esperanzas de una neta mejoría en el sistema investigador español quedaron en parte frenadas, y en algún caso incluso frustradas, mientras que sólo cabe otorgarle el suspenso más notorio al interés de los ciudadanos por el hecho científico