La formación on line tiene un elemento fundamental: el alumno, y unos aliandos imprescindibles: la plataforma y los contenidos. A partir de estos elementos deben construirse los proyectos de e-learning. Para las empresas este tipo de formación supone un menor coste y la posibilidad de una formación más continuada para sus empleados. Para los profesionales, la mejor opción de compatibilizar reciclaje y trabajo. El e-learning está en plena evolución por lo que es difícil predecir cuáles serán sus retos a largo plazo. Pero, a corto plazo, los retos pasan por perfeccionar los medios tecnológicos y las herramientas para acceder a la formación on line y por conseguir una mejor adaptación de los contenidos al nuevo medio. Además, queda un largo camino por recorrer para vencer la resistencia que todavía existe hacia la implantación de las nuevas tecnologías en la educación.