Cuando la implantación de mejoras se convierte en una meta compartida por todos, los resultados son más positivos y rápidamente visibles, tanto dentro como fuera de la empresa. En este contexto, la metodología del trabajo en equipo, y en concreto la que introduce los equipos multidisciplinarios y multijerárquicos, se presenta como una alternativa de valor, en la medida en que permite reunir personas de distintos departamentos y niveles dentro de la empresa para que analicen situaciones diversas desde diferentes puntos de vista. En un taller kaizen la aplicación de equipos de trabajo multidisciplinarios y multijerárquicos es la herramienta clave para presentar a la gerencia una solución consensuada y, en la mayoría de los casos, que no precisa de inversión económica.