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Elena Morató
El caligrafismo clásico como arte aplicado y el caligrafismo contemporáneo como aportación revolucionaria a la relectura de una práctica centenaria, son sin duda las dos caras de un mismo fenómeno (dialéctica) cultural. En este artículo, en el que se analizan dichas manifestaciones artísticas a través de la obra de dos de sus principales exponentes -A. Moustafa y N. Mahdaoui-, la autora se plantea un acercamiento al lenguaje asociado a una creación plástica contemporánea de amplias raíces tradicionales. Tras una época de crisis que comenzó en la década de los ochenta, el caligrafismo retoma otra vez su impulso creativo, y jóvenes artistas, como Moustafa y Mahdaoui, se sentirán atraídos por él, convirtiéndose en nuevos exponentes de una tradicional expresión artística musulmana
