La revolución francesa proporcionó los elementos básicos para la construcción de los sistemas referenciales de percepción histórica y antropológica contemporánea a través del desarrollo de una genealogía plural del "yo" iniciada en Voltaire que aún es la base de la interpretación del pasado en nuestros días. La mirada de Volney, testigo y artífice de esa genealogía del "yo", nacida de la subjetividad cartesiana, y diseñada con los atributos de la ingenuidad y sentimentalidad schilleriana, constituye el eje del proceso de construcción de nuestro sistema de percepción histórica. La apropiación ideológica del pasado que se muestra en el proceso de deconstrucción epistemológica que Volney realiza, resume el tránsito entre Ilustración y Romanticismo estableciendo, un sistema de observación nacido de la percepción subjetiva de una sociedad sobre sí misma y sobre la finalidad que la sostiene