Juan M. Fisac Herrero
El agua es una fuente de vida que exige un serio compromiso con una mejor gestión de los recursos y los consumos. Para ello hay que trabajar en la optimización del uso del agua mediante la modernización de los regadíos, la mejora de la calidad del agua y el fomento de la eficiencia en los sistemas de abastecimientos, al tiempo que se minimizan los niveles de pérdidas en la red. Además, una adecuada política de aguas que tenga la vista puesta en el futuro no puede abandonar la construcción de embalses en un país de climatología irregular como es España.