La "reforma" en la Secretaría de Naciones Unidas tiene un escaso peso en el documento final que el Secretario General presentó en la Cumbre Mundial de 2005. Este asunto es políticamente poco atractivo, comparado por ejemplo, con la reforma del Consejo o la Oficina de Derechos Humanos. Sin embargo, Kofi Annan propuso la creación de una Oficina de Etica y diversos cambios para mejorar la transparencia, que podrían contribuir al fortalecimiento de la Secretaría General de la ONU.