Javier Hernández Peña
El Primer Tratado de Lomé, firmado en 1975, ha venido dando nombre a la especial relación que liga a la Unión Europea con los países ACP (países de Africa, del Caribe y del Pacífico); desde entonces estos Tratados se han ido sucediendo cada cinco años, con ampliación de número de sus firmantes, tanto por la parte europea como por la parte ACP. El presente artículo analiza los rasgos peculiares de esta relación, que la singularizan dentro del contexto mundial de la Cooperación al Desarrollo, y el proceso seguido hasta la firma de la nueva Convención UE-ACP el pasado junio en Cotonou (Benin).