El panorama europeo está marcado por la pérdida de los referendos sobre el Tratado Constitucional de la Unión en Francia y en Holanda. La victoria del "No" cuestiona un complicado proceso y está sirviendo para que tomen ventaja los euroescépticos neoliberales, que sólo desean un mercado económico común. Mientras en España algunos se concentran en la reforma de sus Estatutos de Autonomía y echan carreras a ver quién llega más allá y obtiene más poder y más recursos a costa del resto del país.