Desde hace varios años es patente la preocupación de la Unión Europea por el desarrollo y subsistencia de la empresa familiar. Este interés se ha plasmado en normas de orden interno adoptadas por los distintos países de la Unión; entre ellos, España. Concretamente, en el ordenamiento jurídico tributario español, la protección fiscal de la empresa familiar se ha traducido en la adopción de un entramado de medidas legislativas, que afectan a diversos impuestos