Los derechos fundamentales recorren de forma transversal todo el texto del Tratado Constitucional europeo y están presentes como un elemento esencial en las partes I, II y III del mismo. De esta manera los derechos fundamentales son considerados simultáneamente como valores sobre los que se construye la Unión, como objetivos a alcanzar enla ejecución de sus políticas y acciones, y como límites de los poderes reconocidos a las instituciones y órganos de la Unión y a los propios Estados miembros.