El desarrollo de la capacidad de expresión artística no verbal forma parte de las necesidades que se presentan desde edades muy tempranas. El niño siente la necesidad de expresarse a través del sonido, del tacto, del movimiento corporal, del garabato, del color, de las formas, del molumen, del espacio..., en definitiva expresarse en el más amplio sentido del término. La escuela debe fomentar la capacidad expresiva y el desarrollo de la imaginación y la creatividad, porque contribuye a formar seres libres y capaces de crear iniciativas imaginativas en cualquier campo del desarrollo humano