Además de las crisis que enfrentan las profesiones que atienden los aspectos sociales, originada por el debilitamiento gradual del modelo de Estado Benefactor que las había legitimado, Trabajo Social enfrenta una crisis adicional en el sentido que no se ha construido el espacio necesario para reflexionar sobre la nueva complejidad social que requiere formas novedosas de tratamiento, donde se incluya la participación social en una nueva dimensión. En tal caso, este artículo esboza algunos planteamientos que podrían ayudar a explicar las causas iniciales de la crisis de contexto que han comenzado a afectar las acciones que podemos considerar consustanciales a nuestra profesión; junto con ello también incorpora algunas reflexiones que desmitifican la imposibilidad de teorizar por Trabajo Social y más bien incorpora la necesidad de hacerlo en forma urgente, en la medida que se requiere formalizar un conocimiento acumulado que sirva para explicar los derroteros de la cuestión social hoy en día.
In addition to the crisis facing professions that address social issues, caused by the grad-ual weakening of the welfare state model that had legitimized them, Social Work faces an additional crisis in that it has not built the necessary space to reflect on the new so-cial complexity that requires innovative forms of treatment, where social participation is included in a new dimension. In this context, this article outlines some approaches that could help explain the initial causes of the contextual crisis that has begun to affect the actions we consider essential to our profession. It also incorporates some reflections that demystify the impossibility of theorizing through social work and, rather, incorporates the urgent need to do so, insofar as it is necessary to formalize the accumulated knowledge that serves to explain the current paths of the social issue.