Rosa María Torres Valdés
, Mª Carmen Quiles Soler, Ana I. Ibáñez Hernández, Cristina Arribas Mato
Los problemas de salud mental se perfilan como la principal causa de discapacidad en el mundo en 2030. La esketamina se presenta ante la opinión pública como un tratamiento “milagroso” contra la depresión persistente, incluso capaz de prevenir el suicidio. Sin embargo, la prescripción de este fármaco no está exenta de controversia, entre sanitarios y científicos. Esta falta de consenso redunda en desórdenes informativo-comunicativos en torno a esta cuestión, especialmente cuando personajes polémicos, como Elon Musk trivializan su consumo. En su presentación ante la opinión pública se ocultan estrategias publicitarias tras técnicas habituales de las Relaciones Públicas. El objetivo de este estudio es identificar, desde una perspectiva crítica, el uso indebido de prácticas relacionales como la organización de eventos científicos, que resultan en publicity relacionada con este fármaco. Se analiza el contenido de diferentes eventos hasta finales de 2024, para después estudiar las noticias publicadas (n=45) en la edición digital de los diarios generalistas con mayor número de lectores diarios en España: El País, El Mundo y ABC, hasta marzo de 2024. Los resultados muestran la capacidad del lobby farmacéutico para posicionar sus productos en la agenda pública, mediante el uso de la organización de eventos y la publicity con fines publicitarios, esquivando la legislación y vulnerando la deontología profesional. Se identifica una serie de eventos, cuyo resultado son noticias coincidentes en el tiempo y en los medios, cuyo análisis muestra descontextualización en la cobertura informativa de salud mental y el uso de esketamina contra la depresión persistente. Resulta necesario revisar los estándares de comunicación responsable y códigos de conducta profesionales de Relaciones Públicas en lo concerniente a la gestión de lobby y los asuntos públicos en relación con la salud, así como fomentar la cooperación interdisciplinar para mejorar el nivel de alfabetización de Relaciones Públicas y de alfabetización mediática en relación con la salud de la ciudadanía en general, y la salud mental y “curas milagrosas” en particular.