El presente texto pretende contribuir al análisis del desplazamiento contemporáneo de la primacía otorgada al concepto de «clase» para explicar la estructura de la sociedad y las políticas sociales, a la preponderancia actual del concepto de «diversidad». Eso redunda en la especificidad de dichas políticas, entre otros en el campo de la educación, y exige reconsiderarlas como «políticas de cuidado», como preconizan los feminismos.