Jhenny F. Rivas Alberti, Alexander P. Espinoza Rausseo
Mediante el pin parental, los padres pueden objetar o vetar determinados contenidos de los programas educativos, por considerar que los mismos son contrarios a sus convicciones morales, religiosas y hasta filosóficas. Este veto parental tiene como fundamento el derecho preferente de los padres en la educación moral y religiosa de sus hijos. No obstante, tiene como límites los propios derechos y libertades fundamentales de niños y adolescentes. La educación sexual in-tegral tiene por objetivo la adquisición de información precisa, neutral, plural y objetiva, basada en evidencia científica, apropiada para la edad y madurez sobre la sexualidad. El contenido de la educación sexual también comprende aspectos directamente relacionados con principios, va-lores democráticos y derechos fundamentales consagrados en la Constitución, esenciales para la convivencia pacífica y responsable en sociedad. El Estado en cumplimiento de su deber de neutralidad en la educación debe garantizar que los contenidos y la forma en que se imparta la educación sexual integral cumpla con las características de neutralidad, objetividad, pluralidad y no adoctrinamiento
Through the parental PIN, parents can object to or veto certain content in educational programs, considering them contrary to their moral, religious, and even philosophical convictions. This parental veto is based on the preferential right of parents to the moral and religious educa-tion of their children, a right limited by the fundamental rights and freedoms of children and adolescents. Comprehensive sexuality education aims to acquire accurate, neutral, pluralistic, and objective information about sexuality, based on scientific evidence, and appropriate for the age and maturity of the child. The content of sexuality education also includes aspects directly related to democratic principles, values, and fundamental rights enshrined in the Constitution, which are essential for peaceful and responsible coexistence in society. The State, in fulfilling its duty of neutrality in education, must ensure that the content and method of delivery of compre-hensive sexuality education comply with the characteristics of neutrality, objectivity, pluralism, and non-indoctrination.