El Teatro Real ha llevado a cabo un ambicioso plan de modernización enfocado en la sostenibilidad ambiental, convirtiéndose en un ejemplo de eficiencia energética en el ámbito cultural. Con medidas como renovación de sistemas de climatización, implantación de energía solar fotovoltaica o uso de inteligencia artificial, ha alcanzado la calificación energética A y ha reducido su consumo casi a la mitad.
El desarrollo de nuestra sociedad está condicionado por el uso y aprovechamiento de la energía, siendo la palanca principal de la garantía del bienestar