Las tres sentencias del 4 de octubre de 2024 emitidas por el Tribunal de Justicia, todas ellas en relación con el Sahara Occidental, revisten una importancia considerable. No solo porque parece que ponen fin a las controversias jurídicas sobre la cuestión del Sahara Occidental en el Derecho de la Unión Europea, sino porque contienen aportaciones importantes, algunas innovadoras, otras clarificadoras, tanto respecto a la cuestión saharaui como respecto a ciertos temas del Derecho Internacional Público (en particular la cuestión del consentimiento presunto del tercero no parte en un tratado) y del Derecho de la Unión Europea (Derecho Internacional imperativo como elemento de la supralegalidad comunitaria).