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Elmer O. Campos Rumay, Claudia E. Mori Ugarte, Segundo Edwin Cieza Mostacero, Manuel E Castañeda Cruzado, Elizabeth K. Bravo Huivin
El acoso sexual en videojuegos en línea es un problema creciente que afecta jugadores de todas las edades y géneros, que se manifiesta a través de comportamientos y comentarios de naturaleza sexual no deseados, que incluyen desde insinuaciones y comentarios ofensivos hasta proposiciones explícitas. Este fenómeno genera un ambiente hostil y desagradable para las víctimas, causando estrés emocional, ansiedad y afectando negativamente su experiencia de juego;
asimismo, las consecuencias pueden ir desde la evitación de ciertos juegos o plataformas hasta el abandono completo de la comunidad de jugadores; puesto que, la complejidad del entorno digital y globalizado de los juegos en línea presenta desafíos para la aplicación afectiva de políticas y normativas contra el acoso y resulta ser crucial implementar políticas claras, sistemas de reporte accesibles y programas educativos para fomentar una cultura de respeto y responsabilidad entre los jugadores y desarrolladores. El acoso sexual es un mal endémico que se encuentra en constante evolución y adaptación y, se puede advertir no solo en redes sociales sino también en videojuegos en línea; asimismo, resulta ser primordial cuidar la salud mental de quienes sufren o son víctimas de acoso sexual, porque puede desencadenar en una depresión y esto puede ocasionar un suicidio, que muchas veces parece no preverse, pero cuando se da, ya es muy tarde.
Sexual harassment in online video games is a growing problem affecting players of all ages and genders, manifesting itself through unwanted sexual behaviors and comments, ranging from offensive comments and innuendos to explicit propositions. This phenomenon creates a hostile and unpleasant environment for victims, causing emotional stress, anxiety, and negatively affecting their gaming experience. The consequences can range from avoiding certain games or platforms to completely abandoning the gaming community. The complexity of the digital and globalized online gaming environment presents challenges for the effective application of anti-harassment policies and regulations, and it is crucial to implement clear policies, accessible reporting systems, and educational programs to foster a culture of respect and responsibility among players and developers.
Sexual harassment is an endemic evil that is constantly evolving and adapting, and can be seen not only on social networks but also in online video games. Likewise, it is essential to take care of the mental health of those who suffer or are victims of sexual harassment, because it can lead to depression and this can cause suicide, which often seems unpredictable, but when it happens, it is already too late.
