Han pasado más de dos años desde que entró en vigor el nuevo régimen de homologación judicial de planes de reestructuración y todavía existen serias discrepancias en torno al alcance del control judicial del perímetro y de la formación de clases. En cuanto al perímetro, aunque algunas resoluciones judiciales han permitido al solicitante definir el perímetro a su capricho, la línea mayoritaria en la doctrina y en los tribunales está de acuerdo en la necesidad de control judicial, aunque discrepa en torno a su fundamento. En cuanto a las clases, el criterio judicial inicial, demasiado flexible, se ha ido corrigiendo en resoluciones recientes. En este artículo defendemos la necesidad de un control judicial estricto, para evitar los abusos, en los supuestos de arrastre cruzado y, en especial, en el que presupone la mayoría de clases, por ser el que se presta con más facilidad a la manipulación por parte del solicitante.
More than two years have passed since the new regime for judicial sanctioning of restructuring plans came into effect, and there are still significant disagreements regarding the scope of judicial control over the perimeter and class formation. Regarding the perimeter, although some judicial decisions have allowed the applicant to define the perimeter at his will, the majority view in doctrine and courts agrees on the necessity of judicial control, albeit with differing opinions on its basis. Concerning classes, the initial judicial criterion, which was overly flexible, has been adjusted in recent rulings. This article argues for the necessity of strict judicial control to prevent abuses, particularly in cross-class cram-down scenarios and especially in those assuming a majority of classes, as they are more susceptible to manipulation by the applicant.